PREMIO A LA INTELLIGENTZIA

Después del papelón que realizó la oposición durante la semana pasada, protagonizando escenas dantescas en las que se pudo ver a piqueteros de la CCC gomereando oficiales de la federal en defensa de las AFJP, a De Angeli con un megáfono arengándolos y hablando de "muertos al pedo", y una Lilita en el obelisco rodeada de foristas furibundos de La Nación forcejeando con periodistas, los muchachos enemigos del oficialismo se vieron obligados a buscar a los primos mayores. En esta ocasión, una seria y respetable fundación alemana, la Fundación Konex, que le agrega un poco de mesura a la marcha sin quitar la nota de glamour.

COBOS FUE INVITADO ESPECIAL. BUZZI, BERGMAN Y BINNER, GALARDONADOS
Los premios Konex se escriben sin K
El acto se desarrolló en la Facultad de Derecho. El reconocimiento, que se realiza cada año a personalidades “de la última década” incluyó, casualidad o no, a numerosos críticos del Gobierno. El Konex de Brillante fue para el juez Carlos Fayt.

Cabe aclara que más abajo dice que también se le entregó un galardón a la sra. Estela de Carlotto, que me imagino que a estas alturas debe tener una inflamada verba anti-K, de lo contrario no habría recibido tan independiente premio.

Entre las notables voces independientes que recibieron la estatuilla o no sé qué mierda será, también pudimos encontrar a: el combativo ruralista Eduardo Buzzi; el ausente Héctor Magneto, CEO de diario Clarín; el presidente de La Nación, Julio Saguier; el rabino Sergio Bergman; el histórico dirigente radical Raúl Baglini; el presidente de Shell argentina, Juan José Aranguren; y nada más ni nada menos que el hiper empresario sojero Gustavo Grobocopatel. (este último del mayor agrado de sobrecito).

Y visitando la página de la fundación Konex, pudimos ver también que también han sido honrados con este galardón personalidades tan independientes como Amalia Lacrozze de Fortabat en 1988 y Mariano Grondona en 1997.

Claramente éste es el premio a la Intelligentzia, el premio del bienpensamiento tilingo para sus mayores referentes (cuando no, golpistas), con alguna excepción cada tanto como la Sra. de Carlotto para lavarse un poco la cara.

Anarko Peronismo nunca aspiraría a tal premio, ni tampoco iría nunca a una de esas entregas. Ojo, el día que nos nominen por ahí la cosa toma otro color. Lo único que podemos afirmar con certeza es: Jorgito, dejate de joder...