Todos los 25 de Marzo (fecha de la contra-memoria) se celebra en nuestras pampas el día del Gauchito Garca. A diferencia del más populachero Antonio Mamerto Gil Núñez (alias Gauchito Gil), este santito derecho y humano es el santo patrono de las mejores tradiciones argentinas.
La altanería; ese sentido común canchero; ese desprecio por la política; el autoritarismo; el elogio a la brutalidad; un afectado patriotismo discursivo que en francia llamarían Chauvinismo, y que un buen jauretchiano llamaría simplemente Patrioterismo; pero por sobre todo una devoción a la propiedad privada que llega al punto de perjudicar al bien de la comunidad. Este santito bendice a todos aquellos que utilizan la violencia como móvil político para defender sus intereses económicos, todo esto sazonado por un impostado plebeyismo que oculta un terrible desprecio por lo plebeyo.
El Gauchito Garca bendijo a los aviadores que bombardearon la Plaza de Mayo en el ´55, estuvo con la junta en el ´76 y festejó como nadie los goles del matador Kempes en el ´78. Se entusiasmó mucho con la invasión a las Islas Malvinas en el ´82 aunque no tuvo ningún problema con el desguace del patrimonio nacional durante los ´90. Y este año que pasó estuvo a la vera del camino defendiendo a la patria estanciera y tradicional, contra aquéllos que desde 1945 no quieren terminar de entender que la Argentina vive del campo.
Nosotros los Anarko Peronistas no creemos en estas figuras para ignorantes y brutos, no sólo porque somos ateos sino porque además soñamos con un país industrializado, de vacas flacas y sometido a la subversión internacional.
La altanería; ese sentido común canchero; ese desprecio por la política; el autoritarismo; el elogio a la brutalidad; un afectado patriotismo discursivo que en francia llamarían Chauvinismo, y que un buen jauretchiano llamaría simplemente Patrioterismo; pero por sobre todo una devoción a la propiedad privada que llega al punto de perjudicar al bien de la comunidad. Este santito bendice a todos aquellos que utilizan la violencia como móvil político para defender sus intereses económicos, todo esto sazonado por un impostado plebeyismo que oculta un terrible desprecio por lo plebeyo.
El Gauchito Garca bendijo a los aviadores que bombardearon la Plaza de Mayo en el ´55, estuvo con la junta en el ´76 y festejó como nadie los goles del matador Kempes en el ´78. Se entusiasmó mucho con la invasión a las Islas Malvinas en el ´82 aunque no tuvo ningún problema con el desguace del patrimonio nacional durante los ´90. Y este año que pasó estuvo a la vera del camino defendiendo a la patria estanciera y tradicional, contra aquéllos que desde 1945 no quieren terminar de entender que la Argentina vive del campo.
Nosotros los Anarko Peronistas no creemos en estas figuras para ignorantes y brutos, no sólo porque somos ateos sino porque además soñamos con un país industrializado, de vacas flacas y sometido a la subversión internacional.
1 comentario:
Si, no queremos este modelo que los ruralista quieren instalar con el poder de la fuerza. Porque el poder de la gente, que avala el actual gobierno democrático, ha dado por superado el modelo neo-liberal en nuestro País. Ya no va más el dios Mercado. En este paradigma, no tienen cabida las protestas de los ruralistas, y menos en la actual incertidumbre por la crisis.
O sea, "tu" santito, fué...
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